Cómo poner bien la lavadora
Puede parecer tonto, pero más personas de las que pensamos no saben cómo poner la lavadora. No nos entiendas mal: todo el mundo sabe meter un montón de prendas en el tambor y pulsar el botón de encendido, pero lavar bien es un arte que se perfecciona con los años. No obstante, estas son las normas básicas para que tus prendas salgan limpias y duren muchos años en perfecto estado.
- Separa la ropa por colores. No es cuestión de hacer 30 montones, solo tienes que separar colores claros de los oscuros.
- Antes de lavar una prenda nueva por primera vez, lee sus etiquetas, estas te informarán de si se puede lavar en lavadora o no, si destiñe, etc. Si no tienes muy claro qué significan los símbolos, puedes leerlos aquí.
- Compra detergente específico para lavadora y, a ser posible, que se corresponda con el tipo de ropa. Por ejemplo, hay detergentes para prendas delicadas o para prendas oscuras.
- Puedes introducir el detergente en el cajetín ( en el espacio con el dibujo II, para una carga ligera, o I para una carga completa y/o con prendas más sucias) o en el tambor, con un cazo especial.
- Ojo con la cantidad de detergente. Sigue siempre las instrucciones del fabricante y ten en cuenta que no por añadir más jabón de la cuenta va a quedar más limpia. De hecho, tus prendas podrían perder color.
- Selecciona programa de lavado y temperatura. Si eres novato, mejor que te decantes por la temperatura fría y programas delicados. Eso sí, a mayor temperatura, más limpia quedará la ropa, pero hay más riesgo de teñido.
- Si es posible, selecciona la velocidad del centrifugado. A más revoluciones, más seca saldrá la ropa, pero tu ropa sufrirá más.
- Tiende la ropa nada más termine el programa, para evitar que cojan humedad y olores. Cuélgala en espacios con luz y calor, con una buena corriente de aire.
- Tíendelas bien estiradas y del revés.