Papel higiénico o toallitas húmedas: ¿qué es mejor?
Aunque Japón es famoso por sus inodoros con función para limpiar nuestras partes íntimas tras hacer uso de este, en nuestro país esa tecnología no goza de la misma popularidad, teniendo que recurrir al clásico y tradicional papel higiénico o, más recientemente, a las toallitas íntimas. ¿Qué es mejor usar: papel higiénico o toallitas húmedas?
Las toallitas húmedas llevan unos años con nosotros y en este poco tiempo, se han convertido en un elemento imprescindible en los bolsos y neceseres por la comodidad. Y es que a veces no sabemos si nos vamos a encontrar con papel higiénico en baños públicos o en los servicios de locales. En este sentido, las toallitas son más discretas y manejables que un rollo de papel higiénico.
Desde un punto de vista medioambiental, las toallitas húmedas constituyen un verdadero problema en depuradoras y canalizaciones, ya que a diferencia del papel higiénico, la mayor parte de las toallitas húmedas no son biodegradables, lo que provoca atascos y averías en la red de saneamiento. En este punto, es fundamental no tirar las toallitas por el retrete. Hay que tirarlas siempre en papeleras y en los contenedores habilitados para ello.
Otro punto a favor del papel higiénico es el precio: las toallitas húmedas son considerablemente más caras, por lo que usar papel higiénico no solo es más sostenible, sino que es más barato.
Algunas personas prefieren las toallitas húmedas porque están humedecidas, algo que puede facilitar el proceso de limpieza de las zonas íntimas, no obstante algunos aditivos como el perfume o su uso continuado pueden provocar dermatitis. No obstante, en el mercado también encontramos papel higiénico perfumado o con aditivos para pieles sensibles. Empate técnico.
Aunque las toallitas resultan más cómodas cuando estamos fuera de casa, por opciones, precio y sostenibilidad el ganador es el papel higiénico. Si bien, cada persona es un mundo y para gustos existen las dos opciones.