Recetas de otoño para llevar a la oficina: crema de castañas y seta
Aunque oficialmente ya es otoño, los primeros fríos no han hecho su aparición hasta la entrada de octubre. Cada vez se hace antes de noche y las recetas de otoño y los platos de cuchara van apeteciendo. Por eso hoy os queremos enseñar una receta nutritiva y reconfortante para llevar a trabajar aprovechando dos ingredientes propios de estas fechas: las castañas y las setas. Ojo porque además es fácil de hacer, y también y muy económica, sobretodo si las setas las hemos recogido nosotros mismos (y la satisfacción será doble), aunque siempre hay opciones económicas y resultonas en el super.
Lo mismo podemos decir de las castañas que ahora van alfombrando los suelos, aunque siempre puedes aprovechar para hacer una visita al icónico castañero que perfuma los centros de las ciudades en los meses invernales y calentarte las manos con un delicioso paquete de castañas.
Esta receta podemos realizarla durante el finde, guardarla en tarrinas individuales para irla consumiendo poco a poco. Incluso se puede congelar.
Ingredientes:
- 500 kg de castañas asadas
- 100 gramos de setas
- Una patata
- Un puerro
- Un litro de caldo de pollo
- 100 ml de nata
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva
Cómo preparar la crema de castañas y puré
Si no tenemos las castañas asadas, podemos hacerlo rápidamente: solo necesitamos darles un corte para pelarlas mejor luego y meterlas al horno durante 15 minutos a 200 grados.
En una cazuela sofreímos el puerro picado hasta que tome color. Añadimos la patata troceada y las castañas, que habremos pelado y partido en trozos. Removemos bien y salpimentamos. Finalmente añadimos el litro de caldo y dejamos hervir por media hora.
En ese momento incorporamos la nata y batimos. Si queda espesa, podemos añadir un poco de caldo o agua.
¿Dónde quedan las setas? Muy fácil, ahora es cuando las laminamos y las salteamos a fuego fuerte durante un par de minutos. Serán las que coronen el plato y le den el toque de aroma y textura. Lo ideal sería hacer esto en el último momento, si bien podemos hacerlo la noche anterior. También se puede optar por añadir unos croutons o algo de queso consistente rallado.